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miércoles, 20 de septiembre de 2017

Mermelada de pera

Llega la vuelta al cole a la rutina y con un poco de suerte, como decía en la anterior entrada, al blog. No ayuda mucho ser un poco torpe (por no decir otra cosa) y haber borrado las fotos de las recetas que tenía para ir publicando esta temporada... Pero como le decimos a Daniel que hoy cumple 16 meses: Nooo pasaaa Nadaa!!!!
Iremos poco a poco con retos y recetas ricas a ver si vuelve el rock and roll hahahah. Hoy es el momento de volver a iniciar el curso con "Desafío en la cocina" y este mes toca salado con Toñi, que he de decir me ha leído la mente ya que tenía yo el chip "mermeladil" hahah, ya tenía unas cuantas hechas cuando nos contó la idea de este mes. He de decir que adoro hacer mermelada aunque no me gusta comerla, la hago para regalar y esta, aunque sencilla es rica con ganas ^^ Manos a la obra!!
Eso si, salen 3 tarros medianos ehh


                                                    Mermelada de pera


                                           Ingredientes:

-1.500 kg de peras ( en mi caso traídas de Ribeira por nuestro amigo Abey)
-700 gr de azúcar
-Paciencia ^^

Por norma general la mermelada y membrillo se hacen en proporción 1/1 pero en nuestro caso no somos nada dulceiros y tendemos a usar la mitad, aún así y, a pesar de que las peras eran más bien tirando a verdes, la mermelada es dulce dulce ^^


En este caso son peras de casa sin sulfatos ni aditivos, alguna con toque de haber sido sacada del árbol o de chocar en el viaje.
Las limpiamos bien y quitamos las partes con toque, dejamos la piel ya que está libre de tóxicos.


Las ponemos en la olla, en mi caso en vitrocerámica ( enamorada de ella desde que nos mudamos) en el nº6. Le echamos la mitad de azúcar que el peso de la fruta.



Dejamos que se haga a fuego lento, removiendo de vez en cuando.



Veremos que la mermelada de pera suelta mucho líquido, no pasa nada, tenemos tiempo y dejaremos que reduzca, para espesar ya está la paciencia y los componentes de la piel de la pera. Dejamos que se vaya evaporando el líquido a fuego medio.


Cuando ya la tengamos espesando un poco y marroncita será el momento de triturar, podríamos dejarla así, pero en mi caso nos apetecía más que fuese suave sin tropezones ^^. La trituramos con la batidora y la metemos en botes limpitos. Si no quisiéramos echar el contenido en caliente, luego sería importante hervir los botes y dejarlos en la misma posición, boca abajo, hasta que enfríe.


Una vez listos ya podremos consumirla o guardarla unos meses hasta que nos apetezca tomarla ^^

Para ver las creaciones de mis compas haz click en: Desafío en la cocina


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